En terapia individual es muy necesario abarcar la vida afectiva y los problemas de pareja de él o la paciente. En sesión puedes descubrir tus falencias en ese aspecto y cómo puedes fortalecer tus relaciones afectivas. También se hace necesario asistir después de una ruptura para reorganizarse emocionalmente y como persona individual.

La relación de pareja evoluciona, cambia y madura, es decir, una relación afectiva pasa por diferentes etapas. Estas fases incluyen momentos agradables y positivos, como situaciones más difíciles, pero por muy unida y armoniosa que sea, añade una fuerte carga emocional que en ocasiones producen conflictos en la pareja.Cuando dos personas se unen y deciden seguir el camino de la vida juntos, añaden sus personalidades, creencias y experiencias previas a la ecuación. Hay muchos roles por decidir y es un esquema cambiante donde la pareja debe adaptarse a los nuevos escenarios de la vida que se vayan produciendo.

Tratamiento psicológico:

Dentro del trabajo psicológico para tener una vida afectiva más satisfactoria es el autoconocimiento y trabajar conceptos como la empatía y la tolerancia. También técnicas del modelo cognitivo conductual para trabajar la ira, el enojo y la inseguridad pueden ser muy beneficiosas para mejorar la vida en pareja.